Nutrición OML STRONG

Esta combinación nutricional de calcio, fósforo, magnesio, zinc, vitamina D y vitamina K2 está específicamente formulada para optimizar la salud ósea y apoyar el bienestar de las articulaciones. Cada nutriente desempeña un papel crucial en el fortalecimiento de los huesos, asegurando un adecuado transporte y absorción del calcio, mientras mantiene el equilibrio necesario para evitar calcificaciones indeseadas en tejidos blandos.

El calcio es fundamental para la densidad y resistencia ósea, y su absorción es maximizada por la vitamina D, que facilita su transporte desde el tracto digestivo hacia el torrente sanguíneo. Además, la vitamina K2 actúa dirigiendo el calcio a los huesos y dientes, evitando que se deposite en las arterias o en otros tejidos, lo cual es esencial para mantener una adecuada mineralización y prevenir problemas asociados con la calcificación arterial.

El fósforo, otro componente crítico en la formación de huesos, se combina con el calcio para formar la estructura básica del esqueleto, asegurando huesos fuertes y saludables. Mientras tanto, el magnesio juega un rol esencial en la síntesis de proteínas óseas, regulando los niveles de calcio y fósforo y contribuyendo a la relajación muscular, lo que es vital para el bienestar articular. La carencia de magnesio puede debilitar la estructura ósea, por lo que su inclusión en esta fórmula asegura un balance adecuado en el metabolismo mineral.

El zinc, tiene una función clave en la formación del colágeno y en la reparación de tejidos, lo que lo convierte en un apoyo importante para las articulaciones, manteniéndolas flexibles y saludables. A su vez, el zinc contribuye al proceso de remodelación ósea, esencial para mantener la fortaleza a largo plazo.

Esta combinación es apoyo integral para mejorar la densidad ósea, y para promover la salud de las articulaciones, evitar el desgaste prematuro y promoviendo la movilidad.